miércoles, 4 de diciembre de 2013

¡Sorpresa!

¡Oh por Dios...! Estoy embarazada y todo empezó así...

Me estaba cuidando con la inyección  cuando me di cuenta que me hacía subir de peso y sentirme hinchada todo el tiempo, así que tomé la decisión de dejarla y optar por el DIU. Nunca fui con un ginecólogo o experto en el tema para saber cómo dejar la inyección y demás; así que solamente estaba en espera de mi cita con el ginecólogo para preguntarte TODO lo referente al DIU y poder así iniciar con el tratamiento.


Normalmente compro una caja enorme de tampones y panti protectores (aquí las cosas las llamo por su nombre) en Costco y justo en mi última regla se me habían acabado, así que cuando chequé en mi aplicación del iPhone PeriodTracker y vi que faltaban dos días para que empezara de nuevo, fui corriendo al super a comprar un paquete pequeño de cada uno. Desde ese día empecé a cargar en mi bolsa con una dosis ideal para que no me sorprendiera, y la sorprendida fui yo al ver que tenía 4 días de retraso (eso es algo más o menos normal en mí, a veces soy muy exacta, a veces no), además tenía 4 días sin poder levantarme en las mañanas para ir al gimnasio, era completamente imposible, el único día que logré levantarme de la cama estaba caminando como zombie alrededor de la casa, cargando mi ropa deportiva en la mano, hasta que volví a caer en la cama y dormí. Además, tenía un pequeño malestar en el pecho que me hizo pensar (desear) que ya me venía la regla.

Tres días después ya tenía una semana completa de retraso y decidí que era tiempo de hacer una prueba casera de embarazo, pero me esperé a que cumpliera 9 días de retraso. Ese día, cuando salí del trabajo y llegué a casa fui directamente al baño (llena de pánico) y 2 segundos después (a pesar de que las instrucciones decían "espere 5 minutos" jajaja) ya tenía marcadas 2 líneas. Entonces empecé a caminar alrededor del departamento con unas inmensas ganas de reír (de nervios quiero suponer), hasta que mi pareja (en ese momento) se acercó a mí me abrazo y me dijo "todo va a estar bien, no te preocupes, todo va a estar bien". Dicho esto podrán entender que no estaba en nuestros planes, apenas teníamos 3 meses viviendo juntos y nuestra boda civil iba a ser en Febrero del próximo año y teníamos planeada la de la iglesia 1 año después, así que la llegada de "bebé" era algo que movía nuestros planes por completo.



Al siguiente día (el sábado pasado) sin pensarlo, fui a un laboratorio por una prueba de embarazo en suero, que gracias a la tecnología recibí los resultados esa misma tarde por correo y decía lo que ya esperaba: "Positivo".



Tengo que admitir que no me ha caído el "20" todavía, y hay día en los que no siento nada en lo absoluto. Últimamente mi familia ha tenido ciertos problemas o situaciones que han provocados que nos separemos en pequeños grupos, así que no me siento lo suficientemente lista emocionalmente para darle la noticia a NADIE. Hasta ahora sólo sabe mi mejor amiga Maru (una increíble bloggera sobre moda, decoración y más) y Erika (mi amiga del servicio social). Tengo (tenía) planeado dar las noticias después de la boda, aunque tal vez sea imposible ya que para esa fecha tendré entre 16 y 17 semanas de embarazo y tal vez sea un poco complicado que no se note antes.


Mientras tanto, me desahogaré aquí, escribiendo todo lo que sienta y viva con esta experiencia, dejando en cada publicación un poco de mi historia y mi corazón, esperando liberar aquello que todavía me lastima y poder así disfrutar mi embarazo justo como "bebé" se lo merece.





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